Cuando pensamos en adquirir una vivienda, de todos los tipos que existen, el concepto de “chalet”, irremediablemente, lo asociamos a una gran inversión económica. Incluso fuera de nuestro alcance. Pues bien, esto está cambiando gracias a los chalets prefabricados que distribuyen empresas como Travexport. Merece la pena analizar las características de estas viviendas y sus ventajas.
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Características de los chalets prefabricados y cómo se instalan
Tienen un antecedente en las cabañas prefabricadas y las casas modulares que ya hemos analizado en este blog. Como estos tipos de viviendas, el concepto “prefabricado” tiene que ver con el hecho de que las partes de, en este caso, un chalet se fabrican y montan en una fábrica. Tras esto, se trasladan lugar donde se quiere construir en el chalet para colocar y unir todas las piezas.
El hecho de que los chalets prefabricados no se construyan en el propio terreno no significa que no se puedan personalizar. Es decir, la relación del cliente con la empresa fabricante de chalets prefabricados comienza con el diseño de la construcción. En esa primera fase, los clientes pueden elegir multitud de materiales (piedra, madera, metales…), número de habitaciones, alturas y demás cuestiones para crear el chalet a la medida de cada cliente.
Antes de entrar en las ventajas de los chalets prefabricados con respecto a los industrializados, decir que los primeros no requieren de obra para crear los cimientos. Tampoco, en muchos casos, es necesario pedir permisos de obra. Esta consiste más en el montaje, aunque siempre haya que tocar el terreno para canalizar, extender cables eléctricos, etc.
Ventajas del chalet prefabricado con respecto al industrializado
Empecemos por lo más importante: el precio. Depende por supuesto del tamaño, materiales y demás recursos a utilizar, pero un chalet prefabricado como el de la imagen, sobre una superficie de 100m2, puede rondar los 95.000€. Si ese mismo chalet lo queremos industrializado y construido in situ, el precio sube a los 130.000€
Otra ventaja muy importante (en general de las viviendas prefabricadas) es la rapidez con la que se deja lista. Mientras que la construcción de un chalet industrializado se puede demorar meses, el formato prefabricado suele durar semanas. El no tener que cimentar y, en muchos casos, pedir licencias y demás también ayuda a reducir ese tiempo.
Otro aspecto muy importante es la eficiencia energética, lo cual tiene un beneficio para el bolsillo del usuario al gastar menos energía, y también para el ecosistema, al emitir menos gases efectos invernadero. ¿Cómo se logra esto? La empresas dedicadas a fabricar viviendas prefabricadas utilizan los mejores aislamientos térmicos del mercado consiguiendo la mejor estanqueidad. Esto incluye suelos de tarima flotante, aislamiento para ventanas y materiales en general más allá de los llamados “humedos” como el hormigón o yesos. Es importante recordar que, dado que la construcción de las partes de un chalet se produce en una fábrica, esta tiene unos controles de calidad más estrictos que los que pueden sufrir una construcción sobre el terreno.
Las dos últimas ventajas de los chalets prefabricados tienen que ver con el aislamiento acústico, que como el térmico se debe a la utilización de materiales creados con esa cualidad de aislar al máximo el sonido, y con el hecho de contar con las últimas tecnologías en vivienda. Este último aspecto se desglosa en: seguridad con sistemas de vigilancia, el uso de paneles solares y otras fuentes de energía limpias, o a habilitar en toda la casa la domótica para facilitar el día a día de los inquilinos.
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Terminamos este repaso a las características del chalet prefabricado recordando que las viviendas en general se han convertido en la punta de lanza en el sector de la construcción habitacional, por lo que habrá que esperar novedosos cambios. Entre tanto, para los interesados en adquirir este tipo de chalet, la empresa Travexport cuenta con buena reputación y una relación calidad-precio muy recomendable.
