Mantener limpia tu casa y tus enseres personales suele ser un trabajo rutinario, excepto cuando te encuentras con manchas difíciles de quitar. Pueden aparecer en cualquier lugar, pero las más comunes son las manchas en el suelo, las cuales a veces requieren de tratamientos especiales para poder hacerlas desaparecer. Bien, por nuestra parte hemos seleccionado algunos consejos y trucos que los expertos nos recomiendan para quitar esas manchas imposibles.
Quitar manchas difíciles del suelo
Lo de limpiar suelos es prácticamente un oficio. Especialmente por dos razones:
- La manchas pueden ser de todo tipo: aceite, óxido, pintura, grasa, comida, vino…
- Hay muchos tipos de piso, siendo los de madera y parquet los más sensibles y difíciles de limpiar.
Por estas dos razones y para no dañar el piso, es importante seguir un procedimiento determinado, el cual, en algunos pasos es general a la limpieza de todo tipo de suelos. Los vemos.
- Determinar el producto que ha creado la mancha. Si ha sido líquido, no es lo mismo uno que contenga grasa a otro que no.
- Infórmate sobre las características del suelo. Si, por ejemplo, es parquet has de ser muy cuidadoso para no dañar la madera. También es importante, para pisos de mármol o gres, tener en cuenta su porosidad y no quitar durante la limpieza el sellador de las juntas para evitar tener que aplicar una «lechada».
- Usa el producto adecuado para cada suelo, de lo contrario puedes dañarlo de forma definitiva.
- Empieza la limpieza con un barrido de la superficie. En el caso de manchas de comida u otros sólidos, suele quitar parte de la mancha sin dañar el piso, incluso el parquet.
- Después, con una solución de agua y jabón neutro –excepto en pisos de madera–, puedes fregar la zona de la mancha con la fregona húmeda y ver cuando se seque la cantidad de mancha que se ha quitado.
- Si la mancha continua, puedes probar a utilizar –sólo sobre superficies duras– productos como el cloro jabonoso o una mezcla de agua, bicarbonato y vinagre. En el caso del parquet, es importante que esa mezcla esté más aguada y se aplique sólo en la zona de la mancha. Siempre con un paño no muy mojado y absorbente o una bayeta de microfibra para no dañar la madera.
- En los casos más extremos –especialmente si la mancha se ha endurecido– puedes utilizar una espátula. Esta debe ser nueva (sin óxido) y estar bien afilada para poder penetrar entre el suelo y la mancha sin dañar el primero.
- Si cuentas con maquinaria, siempre puedes apostar el pulido de suelos, muy útil para pisos duros.
- Por último, en el caso de los suelos de madera, parquet y derivados, tras eliminar la mancha es recomendable aplicar una capa de barniz para devolver el brillo a la superficie y disimilar la zona más clara que ha podido quedar tras quitar la mancha.
Hasta aquí, una serie de consejos que cualquier persona, de forma metódica, puede realizar. Por supuesto, si cuentas con un suelo sensible o la mancha es de tipo corrosivo, siempre es recomendable recurrir a profesionales para evitar dañar el suelo de forma permanente al aplicar productos inadecuados.
Lo que es seguro es que prácticamente cualquier mancha, por dura que sea, con el procedimiento correcto, se puede eliminar.